Saber que a las avispas parásitas les gustan los pulgones es una cosa; producirlas en grandes cantidades, envasarlas adecuadamente y transportarlas a todas las esquinas del planeta es otra cosa. La avispa parásita es sólo uno de los más de treinta productos naturales que Koppert suministra.

En nuestro centro de investigaciones en la ciudad holandesa de Berkel en Rodenrijs, unas treinta personas se dedican continuamente al desarrollo de nuevos métodos de control biológico y polinización, así como a la mejora de las aplicaciones existentes. Manteniendo un contacto estrecho e intercambiando conocimientos con institutos científicos y de investigación (internacionales), distribuidores y usuarios, podemos responder con rapidez a las amenazas representadas por nuevas plagas, así como ampliar nuestros conocimientos y mejorar nuestros métodos de producción, envasado, transporte y monitoreo. Un buen ejemplo de ello es el departamento de investigación microbiana creado por Koppert, que investiga el control microbiológico de plagas y enfermedades, que se deberán controlar de forma creciente usando medios que no sean químicos. Koppert ya se encuentra en una fase avanzada del desarrollo de métodos para el control biológico de enfermedades de la raíz y micosis aéreas, como el oídio.