El saneamiento del cultivo se refiere a los procedimientos cuyo objetivo son la prevención o erradicación de fuentes y vectores de plagas y enfermedades, reduciéndose así la presencia de estos organismos nocivos y disminuyéndose la necesidad de usar insecticidas químicos. También aumentan las oportunidades de éxito del control biológico.
- Empiece con plantas limpias. El material de plantación debe estar libre de plagas y enfermedades.
- Retire las hojas viejas rápidamente y con cuidado. Se ha de eliminar rápidamente el material de plantación considerado no apto, los montones de basura y otras fuentes de infestación.
- Controle regularmente la presencia de plagas y enfermedades durante todo el ciclo del cultivo. El material infestado se ha de colocar en una bolsa de plástico y eliminar con el fin de evitar una mayor propagación.
- Elimine rápidamente las malas hierbas, ya que suelen ser los huéspedes de plagas y enfermedades y pueden ser la vía a través de la cual una infección pasa de un cultivo viejo a uno nuevo.
- Evite dañar las plantas. Los daños son una vía de entrada para infestaciones secundarias.
- Organice el trabajo de cultivo de modo que los trabajadores se muevan de las áreas limpias del cultivo a las infestadas. De esta forma se puede reducir la dispersión de las plagas y enfermedades a las áreas limpias del cultivo.
- Evite la transmisión de organismos nocivos a través de personas, máquinas o herramientas. Ofrezca batas de laboratorio limpias a los visitantes (ej. representantes comerciales) y restrinja el acceso a los cultivos. Desinfecte el calzado, equipos, cuchillos, tijeras, etc. La leche desnatada puede encapsular virus que son transportados por las herramientas.
- Evite la transmisión de organismos nocivos a través del agua. El agua de irrigación procedente de acequias o de un depósito de agua puede contener esporas infecciosas. La desinfección puede prevenir este problema.
- Retire los refugios de los organismos nocivos. Las babosas y caracoles, por ejemplo, se suelen esconder cerca de las plantas. Enseñe a sus trabajadores a que estén alerta.
- Empiece con una área de cultivo limpia. El suelo o sustrato para el cultivo no debe contener enfermedades o plagas. Se recomienda aplicar la rotación de cultivos y/o vaporización.